MÁS FORMAS DE SER HOMBRE.

Por: Angel Suarez

Son hermosas las mujeres trabajando. O por lo menos para mi es lo que me parece… será porque me gustan la mujeres fuertes e inteligentes.

Pudiera parecer que al principio del siglo 21, uno conocería a personas un poco menos convencidas de que la forma de ser machista, simplemente causa más problemas que soluciones bajo las condiciones actuales. Pero sucede que no. Tanto hombres como mujeres siguen obedientemente jugando los roles tradicionales sin cuestionarse si es lo que quieren para si mismos, mas bien aceptando que eso es lo que se espera de ellos y ellas. Naturalmente lo hacen de una forma tan inconscientes que si les preguntas si se consideran machistas, invariablemente dirán que no.

Sin embargo, las mujeres creen que es una obligación suya el organizar y atender las necesidades del hogar. Mientras que ellos sienten que su obligación es mantener saludables las finanzas económicas de la familia a la cual esta integrado. Esto es diciéndolo de manera suave y acentuando las cualidades positivas, que ven en el papel que creen debe jugar el hombre y la mujer.

Uno de tantos días, en una conversación de un compañero de trabajo en la hora de la comida en una fonda. Le pregunte como forma amigable de abrir platica.
- ¿Y tu esposa en que trabaja?

Con tono normal y al parecer un tanto inocente frente a la reacción desproporcionada que le siguió. El hecho es que se manifestó ofendido, ¿Cómo su esposa trabajar? Casi como si le dijera que era tan poco “hombre” que no podía mantenerla… o esto lo reflexione yo después, recordando esas antiguas reglas no escritas de la tradición machista.

Recuerdo igual como en tantas conversaciones con distintas amigas, alumnas y discípulas; al hablar sobre sus sueños románticos sobre sus actuales pretendientes el sentimiento más perseguido es el de “seguridad” el clásico “a su lado me siento segura y protegida”. Osea que si se siente segura con el sapo verde, invariablemente esto lo transforma en príncipe. Aunque eso signifique que el tipo es mas una bestia capas de muchas salvajadas pero con la aparente fuerza, vista por ella, para defenderla de todos los potenciales peligros presentes y futuros.

Por lo que los hombres y mujeres “tradicionales” o con “valores” suspiran por cosas tan curiosas como una camisa lavada y planchada. Ellos tal vez por evocar a su madre, ellas por que el servir o “atender” a un hombre prácticamente es su realización como mujer. Visiones sublimadas de un relación amo esclavo, altamente destructiva que al final diluye cualquier oportunidad de conocer el amor verdadero y maduro.
¿o tu que piensas?
 

Foto desde el escritorio en donde me divierto entre semana con los sistemas ..